Tras cuatro años de saneamiento, la mayor reaseguradora de Brasil ha adquirido dimensiones más modestas y ha perdido cuota de mercado. Pero IRB(Re) cree que saldrá de este periodo traumático con un negocio más saneado y preparado para reanudar el crecimiento.

Si esto es cierto o no, sólo el tiempo lo dirá. Los analistas bursátiles reaccionaron con neutralidad tras la publicación de los resultados anuales de IRB(Re) a finales de marzo. Entre los aspectos más destacados figuraban una reducción de más del 17% en el volumen de primas, un descenso de la siniestralidad del 104% al 70% y un pequeño beneficio de 114,2 millones de reales. La rentabilidad (ROE) se situó en el 2,3%.

Genial Investimentos destacó la "mejora gradual" de los resultados, lo que refleja el mensaje que la empresa ha intentado transmitir de que se avecinan periodos de crecimiento menos cargados emocionalmente. Todo un cambio, ya que IRB(Re) ha pasado por muchas turbulencias en los últimos años.

La mejora de los resultados refleja la puesta en orden de IRB(Re) en 2023 para recuperar sus resultados técnicos mediante un proceso de suscripción más riguroso.

"2023 fue un año en el que nos dedicamos exclusivamente a poner orden en la cartera, deshaciéndonos de aquellas operaciones que nunca deberíamos haber hecho. Por ejemplo, geste se retiró de los negocios de riesgos catastróficos en Estados Unidos y el Caribe, o de los negocios agrícolas en India y China."

La desvinculación del exterior, que incluyó el cierre de oficinas en Londres y Buenos Aires, forma parte de una estrategia para devolver a IRB(Re) a su negocio vocacional, que debe ser el reasegurador de referencia en el mercado brasileño.

Pero el ajuste ha tenido un precio: la cuota de mercado de IRB en el mercado local de reaseguros cayó del 57% en 2020 al 33% el año pasado, y gran parte de los encargos que antes habrían ido a la compañía se han colocado en el extranjero en los últimos años.

 

Fuente: RSB

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