El cambio se debe a fenómenos meteorológicos extremos, como las tormentas del sur del país, cada vez más frecuentes.
Los brasileños suelen pagar el seguro del coche, pero no el del hogar. Pero parece que este escenario está empezando a cambiar en el país, con un fuerte impulso del cambio climático, que ha hecho que tormentas, vendavales, incendios y apagones sean cada vez más comunes en el país. El número de viviendas aseguradas pasó del 14% en 2019 al 17% en 2021 y solo entre enero y agosto de este año, la contratación de este tipo de pólizas creció un 13% respecto al mismo periodo del año anterior. Los datos proceden de la Federación Nacional de Seguros Generales (FenSeg).
"El parque automovilístico asegurado en Brasil ronda entre el 35% y el 39%. Y el 17% de los inmuebles residenciales del país están asegurados. Pero han mejorado mucho. En el caso de las casas, hace dos años era del 14%. Dos puntos porcentuales en dos años es bastante significativo para un país que aún carece de una cultura de compra de seguros", explica Ivan Marcos dos Santos, de 44 años, responsable de seguros inmobiliarios de Pottencial.
Para Santos, otro ejemplo de cómo Brasil está cambiando su perfil de consumidor en relación con los seguros fue la pandemia. Durante la era Covid, el seguro de vida pasó de la segunda a la primera cartera. "En otras palabras: la situación [del país] acaba siendo un gran catalizador para la cultura de compra de seguros. Esto ocurre, por ejemplo, en el sur del país. Cuando hace mal tiempo, es muy normal que la gente recuerde la necesidad de tener una póliza y la compre al día siguiente, a la semana siguiente, al mes siguiente...". Hay un pico mucho mayor de compra de seguros que en otras épocas", explica el ejecutivo.
En Pottencial, el aumento de la demanda de seguros de hogar fue mucho más rápido que la media nacional, alcanzando un incremento del 90% de enero a agosto.
Para Santos, el seguro es la forma más barata y fácil de ser reembolsado por daños materiales e incluso, eventualmente, corporales, al asegurar una vivienda. "Y para desmitificar, el precio del seguro del hogar es muy bajo. Para un coche valorado en 100.000 reales, dependiendo de la región del país, el seguro cuesta alrededor de 5.000 reales al año. En cambio, un inmueble de 100.000 reales debería costar 300 reales al año. Por lo tanto, existe una diferencia de precio extremadamente alta", afirma el ejecutivo.
Santos señala que cualquier persona interesada en contratar un seguro de hogar debe buscar un corredor especializado para recibir asesoramiento sobre la cobertura que debe contratar.
Incendios y temporales son los seguros más contratados
El seguro básico del hogar cubre la protección contra incendios, rayos, explosiones, implosiones e incluso accidentes aéreos, pero es posible personalizar las coberturas, incluyendo protección contra actos vandálicos e incluso robos. Los consumidores también pueden contar con asistencia para problemas urgentes que requieran profesionales especializados, como cerrajeros, fontaneros y electricistas.
Atendiendo a la demanda de los clientes, Pottencial tiene previsto lanzar nuevos servicios en diciembre, con lo que la oferta pasará de 11 a 30 servicios. La limpieza de depósitos de agua, el control de plagas y la limpieza de canalones formarán ahora parte de los servicios ofrecidos.
"Estos servicios de asistencia suelen utilizarse mucho más que el propio seguro", recuerda Santos. Pero, según él, los seguros más utilizados son los de incendio y explosión: "hay muchos incendios en la cocina o bombillas que acaban incendiándose y quemando la vivienda y otras situaciones de explosión", explica.
En el sur del país, el ejecutivo afirma que el seguro más solicitado es el de temporales de viento, que daña las propiedades con vientos superiores a 54 km/h. "En otras regiones, los daños eléctricos. En el Centro-Oeste, Mato Grosso y Mato Grosso do Sul, hay una incidencia muy alta de rayos. Aunque se disponga de una red de distribución eléctrica bien estructurada o de inmuebles con toma de tierra, se producen daños en los aparatos electrónicos de la vivienda", afirma.
Santos también señala que el cambio climático ha aumentado la frecuencia de las catástrofes naturales en el país, lo que ha causado importantes daños materiales en las viviendas brasileñas. "El Sur sigue teniendo mucho mal tiempo, hablo de nieve y granizo. Y han sido más frecuentes los temporales marítimos, que invaden las calles. Y en el sudeste, en estados como São Paulo, también es una realidad", explica.
Según el ejecutivo, el aumento de los siniestros debido a la mayor frecuencia de catástrofes naturales en el país aún no ha afectado al modelo de negocio de la compañía, como ha empezado a ocurrir en países como Estados Unidos. Se calcula que cada año se destruyen en Estados Unidos unas 17.000 propiedades debido a fenómenos climáticos, según la First Street Foundation, una organización que estudia los riesgos relacionados con el cambio climático. Se espera que la cifra se duplique en menos de 30 años.
Fuente: O Tempo
Proveemos información Técnica y Financiera del Mercado Asegurador